La diferencia entre los productos orgánicos y los convencionales radica entre otras cosas, en el proceso de producción, que en los productos orgánicos es ambientalmente sustentable, se realiza de forma tradicional, es decir con menor peso a la industrialización; tiende a favorecer el comercio justo, que significa igualar el la dinámica costo-beneficio para los pequños productores y los productores de insumos ante el aumento de utilidad que deviene de la producción masiva; además de que los productos orgánicos certificados se obtienen por medio de la aplicación de la inocuidad superlativa que asegura su excelete calidad e higiene. Todo lo anterior representa que los productos orgánicos son más sabrosos y definitivamente más saludables a largo plazo.
En ésta época de fiestas, es fácil dejarse llevar por la excesiva mercadotecnia que invade el verdadero valor de las celebraciones navideñas, bombardeándonos con información que nos incita al consumismo excesivo, que no es solamente perjudicial para nuestra economia, si no para nuesta salud. Al final la “cuesta de enero” es tanto de nuestras carteras como de nuestro cuerpo.
Es importante hacer un alto y no dejarnos llevar por el impulso de la promoción, al escoger los alimentos con los que celebraremos la Navidad y la llegada del nuevo año. El consumo consciente no es el que adquiere las “ofertas” que en inumerables ocaciones terminan siendo todo lo contrario; es tener presente las concecuencias de nuestras compras y saber que lo que consumimos no sólo afecta nuestra economía familiar y personal, también afecta nuestra salud y la del medio ambiente.
Afortunadamente hoy día hay más opciones para llevar comida saludale y ecològicamente sustentable a nuestra mesa. El pavo, las ensaladas, los postres y dulces, que acostumbrámos disfrutar todos los años es estas fechas, pueden ser preparados con ingredientes orgánicos, desde el vino hasta la cereza del pastel. La salud y la comida deliciosa no están peleadas y puedes tener ambas en tus tradiciones.
Recuerda que lo barato sale caro, y aunque los productos orgánicos puedan parecerte más costosos, estas haciendo una inversión por la salud de tu familia y la del ambiente. Recuerda también que el consumo que aumenta con las compras de fin de año, junto con la oferta de productos y publicidad, igualmente incrementa considerablemente la producción de desechos y basura, por lo que puedes procurar la utilización de empaques reciclables o reutilizar los de otros años, al igual que recurrir a tus viejos adornos, en lugar de comprar unos nuevos.
Consume conscientemente por tí y por tu familia, pero también por el medio ambiene y el desarrollo sustentable del campo, piensa en la economía de nuestro país y elige prductos mexicanos orgánicos y sustentables; hoy en día la oferta abarca el mayor rango de productos que son de la mejor calidad, para que miestras tú y tu familia disfrutan de todos sus beneficios, tu compra se vea reflejada en una economñia rural más justa para todos.